2024-11-21
Bi ziegaren sarrera

Situación de las cárceles españolas como consecuencia de las medidas covid

Ante las nuevas medidas que, bajo la excusa del covid, se están tomando contra quienes están en las prisiones españolas así como contra sus familiares, Tinko quiere expresar los siguiente:

Como hemos dicho en otras ocasiones, la mayoría de las medidas que están tomando los diferentes gobiernos que nos oprimen tienen mucho más que ver con la restricción de derechos y con la propaganda (tener que volver a llevar la mascarilla por la calle, por ejemplo) que con las razones sanitarias.

Cada vez se restringen más los derechos que teníamos en la calle, y la cárcel es un espejo de lo que pasa en la calle, pero aún más violento. Desde el confinamiento de 2020 hasta ahora los ataques contra los presos y las presas han sido constantes. Meses sin actividades, sin visitas, muchas veces sin médicos (en nombre de la salud les quitaron hasta el derecho a ser atendidos)… Cuando después de muchos meses recuperaron las visitas vis-a-vis, después de cada una de ellas les han aislado.

Durante los últimos meses esas restricciones han propiciado luchas por parte de los presos. Ibai Aginaga emprendió una huelga de hambre y sed tras una vis-a-vis para que le practicaran una PCR y le sacarán del aislamiento, en la cárcel de Basauri.

Dani Pastor también empezó una huelga de hambre en Zuera. Fue aislado, sin libros, sin tele o radio. Por medio de aquella lucha consiguió el compromiso por parte de la cárcel para que le sacaran del aislamiento.

El pasado fin de semana allegados de Patxi Ruiz se quedaron sin visita después de viajar a León, porque han suspendido todas las visitas.

En la cárcel de Palencia han suspendido las visitas vis-a-vis, aunque de momento mantienen las visitas tras el cristal.

En Basauri y Zaballa mantienen todo tipo de visitas, y en Martutene solo las de locutorio, siempre y cuando se tenga el certificado covid. Si no, no hay posibilidad de hacer visitas, vulnerando así el derecho a las visitas de los presos y presas y cortando más hilos de las relaciones que mantienen con sus allegados. Estos no son más que los primeros pasos de lo que puede venir en las cárceles de la mano del PNV.

Bajo la excusa del virus han restringido todos los derechos en la calle y, en algunos casos, también los han borrado. Y en la cárcel les han dejado sin casi nada. Al parecer todo vale contra los presos y las presas, sobre todo porque nadie ve lo que pasa dentro. Estas medidas, lejos de basarse en criterios de salud, son herramientas para fomentar el control social.

En una situación de grave crisis económica, en un momento en el que cada vez somos más pobres, lo que buscan es anular el derecho a protestar, organizarse y luchar. Y en ese camino entra empeorar aún más las condiciones de las cárceles, porque ese es el sitio que tienen preparado para quienes se levantan contra la opresión.

Las cárceles, lejos de ser lugares para resocializar a nadie, son lugares para someter a la clase obrera y, muy especialmente, para doblegar la voluntad de los presos y presas políticas. Todo esto para defender los intereses y los privilegios socio-económicos de esos parásitos que forman la burguesía y la oligarquía.

Tinko hace un llamamiento a organizarse ante la represión y a favor de la amnistía. ¡La lucha nos liberará!